Ingredientes:

500 g de cachetes de abadejo,
2 claras de huevo,
200 g de queso fresco,
100 g de ricota,
ralladura de 1 limón,
1 cucharadita de cilantro picado,
1 pimiento colorado,
1/2 pimiento amarillo,
3 cebollas de verdeo,
2 dientes de ajo,
1/2 l de vino blanco,
1 l de caldo de pescado,
1 kg de mejillones frescos,
tomillo

Colocar en un bol la ricota, la ralladura de limón, el cilantro, el queso fresco picado, sal y pimienta negra recién molida.
Mezclar rápidamente y agregar las claras batidas en punto de nieve.
En una fuente profunda, colocar los cachetes de abadejo, salpimentarlos, cubrirlos con la mezcla de queso y gratinar en el horno a temperatura alta.
Por otro lado, calentar una olla profunda, agregar 2 cucharadas de aceite y dorar levemente los ajos en láminas, los pimientos en cubitos y las cebollas de verdeo en rodajitas.
Deglasar con el vino blanco y dejar reducir el líquido a la mitad de su volumen.
Salpimentar, condimentar con el tomillo y agregar el caldo caliente.
Cocinar 15 minutos a hervor bajo e incorporar los mejillones limpios.
Cocinar 5 minutos más y apagar el fuego.
Tapar y reservar.

Servir el caldo con mejillones en un plato hondo junto con algunos cachetes gratinados.